Solo en la ciudad de Bogotá la extorsión aumentó 71 % denunció la representante Carolina Arbeláez, quien advirtió que la mayoría de los casos tienen origen en las cárceles, donde hay cabecillas delincuenciales que tienen acceso a teléfonos.
De acuerdo a las cifras, al menos son siete casos de extorsión que se reportan al día en la capital del país.
Señaló que a los comerciantes los están intimidando y extorsionando, por lo que temen por sus vidas y las de sus familias.
Comentó que es muy grave que los inhibidores de señal de 8 cárceles de máxima seguridad estén fuera de servicio, y en otros 7 establecimientos penitenciarios, se encuentren obsoletos.
Frente a la situación, revisando la ejecución del Instituto Nacional Penitenciario (Inpec), la congresista explicó que solo lleva el 0,12% de ejecución de los programas de inversión en herramientas tecnológicas.
Arbeláez llamó la atención de otro problema ligado a la extorsión y es que los teléfonos y las tarjetas SIM que usan para extorsionar no tienen trazabilidad, porque no hay ningún tipo de control, por lo que anunció su acompañamiento a un proyecto de Ley del representante Julio César Triana que busca regular las tarjetas SIM que se adquieren sin supervisión, para combatir las extorsiones desde las cárceles.