Una de las obras más importantes en la actualidad en Bogotá en desarrollo es la construcción de una nueva troncal de Transmilenio por la avenida 68, por ahí se comenzó a ver cómo sería el colapso de la capital por los trabajos simultáneos que se desarrollan. Cuando se contrató se dividieron 16 kilómetros en nueve tramos, para que igual número de empresas avanzaran en simultáneo.
“Algunos van mejor en la ejecución de sus programas, otros van atrasados”, dijo Diego Sánchez, exdirector del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), quien explicó que no será posible que todos estén terminados al mismo tiempo para que opere la troncal.
Se va a lograr que haya tramos concluidos, como el cinco por la calle 26 que está casi concluido, dijo Sánchez en entrevista con Revista Alternativa.
Pero después de la tempestad viene la calma, el experto en movilidad explica que cuando estén habilitadas las conexiones operacionales, en 2026, se comenzará a notar el descongestionamiento en algunos puntos o desplazamientos en menor tiempo, porque la avenida 68 tiene intercepciones con la troncal de la calle 26, con la avenida de las Américas, en la autopista sur y tendrá en la avenida Suba.
