Desde Bogotá, el viernes pasado, la procuradora Margarita Cabello Blanco expresó su enérgica oposición a la noticia de que se haya invitado a voceros de las disidencias de las Farc, que buscan la reconciliación con el Gobierno, a la ceremonia de apertura de las elecciones regionales.
"El Estado no debe colaborar con actividades ilegales para facilitar el proceso democrático. La defensa de la democracia y la protección de los procesos electorales recae exclusivamente en las autoridades competentes y legítimamente constituidas.
De hecho, reiteré este principio en comunicaciones dirigidas a los ministros de Defensa y del Interior en el día de ayer. Espero que estas comunicaciones sean atendidas por dichas entidades", expresó durante una reunión con Richard Nephew, Coordinador Global Anticorrupción de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley del Departamento de Estado de Estados Unidos (INL); Kalli Beck, asesor en materia de anticorrupción; Emily Yu, jefa adjunta de la división Estado de Derecho; Bernardo Reina, asesor legal; y Helmuth Angarita, asesor en asuntos relacionados con crímenes financieros.
La referencia de Cabello se hizo en relación a que una autoridad electoral había extendido invitaciones a los representantes de la mesa de diálogo entre el Ejecutivo y la disidencia liderada por 'Iván Mordisco' para participar en el acto protocolario relacionado con las elecciones, que estaba programado para llevarse a cabo en Popayán, Cauca. Sin embargo, después de varias versiones contradictorias, tanto la Registraduría como el Consejo Nacional Electoral (CNE) se desvincularon de la situación, afirmando que ellos no habían extendido dichas invitaciones.
