El secuestro del soldado profesional Iván Stiven Torres Úsuga en la vereda Tamacay, en el municipio de Tame, departamento de Arauca, generó reacción por parte de las Fuerzas Militares de Colombia.
En un comunicado, la institución exigió la liberación inmediata de Torres, quien se encontraba en estado de indefensión en el momento de su captura. Las autoridades han calificado el secuestro como una violación grave de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario.
El soldado Torres se encontraba acompañado por Edwin Marcelo Mora Ochoa, un militar en retiro, al momento del secuestro. Según informaron las Fuerzas Militares, todas las capacidades operativas han sido desplegadas para localizar y liberar al soldado.
La institución también hizo un llamado a la comunidad para que colabore con información que pueda ayudar en la captura de los responsables, y proporcionó la línea 147 del Gaula para recibir denuncias.
En cuanto al grupo armado que perpetró el secuestro, el ELN reconoció su responsabilidad en el hecho y anunció que coordinaría la liberación del soldado Torres con una comisión humanitaria. El grupo armado también expresó que en los próximos días se tomarían medidas para facilitar la liberación, a través de una misión humanitaria.
